La rosa es una planta de género femenino, asociada a venus, al elemento agua y a una gran cantidad de dioses: Hathor, Hulda, Eros, Cupido, Deméter, Isis, Harpocrates y Aurora. Tradicionalmente se usa por sus propiedades relacionadas con el amor, el poder mental, la sanación, adivinación, buena fortuna y protección.
La rosa es una planta relacionada con el amor; su sensualidad floral y seductora la hace afrodisiaca, se considera una flor sagrada, símbolo del amor desinteresado.
Tiene una gran capacidad para curar heridas emocionales; cuando el rechazo o alguna pérdida han disminuido el amor propio, el aceite de rosa brinda un consuelo dulce, uniendo la mente con el corazón y llevando calor al alma.
La mitología griega atribuye el origen de las rosas a la diosa Cibeles, también conocida como Frigia, quien, ya que la belleza de Afrodita no tenía rival, creó esta delicada y hermosa flor para que la diosa del amor y la belleza tuviera una digna comparación.